LO QUE DEBES CONOCER ANTES DE HACERTE UN TATUAJE

Consejos prácticos a tener en cuenta al hacerse un tatuaje

Se puede decir que el tatuaje es inherente al ser humano. Desde tiempos remotos el hombre ha pintado y marcado sobre su piel figuras y dibujos con el ánimo de perpetuar en el tiempo algún hecho o suceso de su vida.

Cierto es también que en cada época de nuestra civilización la moda del tatuaje ha tendido a hacia los extremos. Momentos en que la sociedad los rechazaba y momentos, como el actual, donde buena parte de ella los acepta e incluso los aplaude.

Antes que nada, para que no cunda el pánico y se me tache de ‘anti’, diré que un tatuaje, hecho de forma profesional y utilizando todas las medidas preventivas, tanto de orden legal como de orden higiénico-sanitario, no tiene por qué representar problema alguno. Es más, un bonito tatuaje puede añadir nueva prenda a la piel, mostrar el ‘yo’ oculto, manifestar sentimientos, aglutinar modos de vida, ahuyentar temores, etc. etc.

Ahora, ahí van una serie de reglas a modo de consejos que deberías tener en cuenta antes de hacerte un tatuaje.

1.- Un tatuaje se realiza mediante la aplicación de múltiples pinchazos en la piel, que traspasan la epidermis para facilitar que la tinta se fije. Esto hace que la zona tatuada sea vulnerable a efectos de infecciones que pueden incidir en el organismo. No son extraños los casos de infecciones crónicas como hepatitis, VIH y otras, debido principalmente a la falta de correctas medidas higiénicas y sanitarias.

2.- Es imprescindible exigir al centro de tatuajes la homologación del Ministerio de salud o Consejería territorial competente. También la certificación acreditativa que capacite al profesional que va a llevar a cabo el tatuaje.

3.- Asegurarse de que las agujas que se van utilizar están correctamente esterilizadas y sacadas de su envoltorio individual en tu presencia.

4.- Las tintas a utilizar deben estar homologadas en Europa o, en su caso, en el país donde residas. Los envases de las tintas deben ser monodosis.

5.- Toma nota de los datos de los envases de la tintas que se utilizan (fabricante, lote, número de registro sanitario, etc.) Mejor aún, toma una imagen del frasco y guárdala por tiempo indefinido. Esta información te será útil a nivel de posibles reacciones adversas y también en el caso de querer borrar el tatuaje transcurrido un tiempo.

6.- En la elección de colores ten presente que el rojo es el color que más problemas de intolerancia causa, tanto en el corto como en el largo plazo. Por el contrario, el color negro es el que menos reacciones adversas ocasiona.

7.- Como en esta vida nada es para siempre, ten presente que, si en un futuro te quieres deshacer del tatuaje, los colores claros, blanco, amarillo, azul claro, verde claro, etc. son muy difíciles de eliminar. Por el contrario los oscuros, como el negro, azul marino y rojo resultan más fáciles de borrar.

8.- La piel de las personas, al margen de la raza, varía sustancialmente de unas a otras. La edad también marca las características de nuestra piel. Como medida preventiva solicita el consejo y la opinión de tu facultativo o especialista médico antes de hacerte un tatuaje, sobre todo si eres joven.

9.- Las personas que padezcan diabetes, afecciones renales, hepáticas o cardiacas deben prescindir de hacerse ningún tipo de tatuaje. Si es tu caso, consulta antes con tu médico, ya que corres el peligro de reacciones adversas que pueden incidir negativamente en tu salud.

10.- Medita de forma serena la decisión de hacerte un tatuaje. Que la decisión sea tuya y no este influenciada por otros. Si llegas a la conclusión de hacértelo, elige un centro profesional y exige todas las medidas de seguridad expuestas. ¡Ah! y por supuesto, que el artista plasme lo que tienes en tu mente.

Por último, indicar que actualmente el único método eficaz y contrastado para la eliminación de tatuajes es el láser. Este sistema de borrado debe ser realizado por profesionales cualificados, por lo general especialistas médicos de la piel.

Antes de llevar a cabo esta operación consulta con tu dermatólogo. Es él quien te puede ayudar y aconsejar debidamente si quieres eliminar tu, ya no querido, tatuaje. Ten en cuenta, con total seguridad, que borrar un tatuaje cuesta más que hacerlo, tanto en tiempo como en dinero.