Introducción al arte de leer las palmas de las manos

GENERALIDADES

La quiromancia -no confundir con quirología- es un arte adivinatorio que consiste en leer e interpretar el significado que las peculiares características de las manos aportan a cada individuo.

La palabra procede del griego (keir, mano, y manteia, adivinación). Lo que llevado a nuestros días podría traducirse como: interpretar, descubrir y predecir a través de las líneas, forma y signos que aparecen en la palma de la mano, el pasado, presente y futuro de la persona propietaria de la misma. Como la mayoría de artes adivinatorias tiene una antigüedad milenaria. Se tiene constancia escrita de haberse practicado en el antiguo Egipto, Mesopotamia y lejano oriente, hace ya más de 4.000 años.

Aunque también han aparecido indicios de su uso en la civilización precolombina, la mayoría de especialistas en la materia le atribuyen un origen oriental.

Por su parte, son los griegos los que la introducen en la civilización clásica europea, tal como atestiguan algunos textos de Aristóteles.

Nuestras manos tienen una serie de particularidades que se relacionan con todo el resto de nuestro ser. En ellas se almacena la memoria personal, social y colectiva, así como la genética. Se puede determinar las habilidades y debilidades, las aptitudes y actitudes, así como los problemas físicos y psíquicos.

La mano izquierda y la derecha se diferencian sustancialmente y tanto una como la otra tienen sus propias características. Según los expertos, existe la teoría que asigna los componentes hereditarios de la mano izquierda a la madre, mientras que la derecha la relaciona con la genética del padre. A su vez, se atribuye a esta última el futuro y las relaciones personales, mientras que a la izquierda se le adjudica el pasado y el subconsciente del sujeto.

A través de una correcta interpretación se puede acceder al conocimiento íntimo y profundo de la capacidad del individuo y dar con las claves que encierran su futuro.

LOS TIPOS DE MANO

También es importante la forma de la mano. D'Arpentigny, militar francés del siglo XIX, fue quien primero clasificó los tipos de manos según su forma. Estos, según él, son los siete tipos de manos:

La mano cuadrada

La palma es cuadrada, y los extremos de los dedos son de apariencia cuadrada, aunque la forma de la mano es más bien rectangular. Pertenece a personas ordenadas y equilibradas, que lo basan todo en el método y la precisión. Poseen iniciativa y empuje, y son francas hasta el punto de crearse problemas con su franqueza.

La mano cónica

Esta mano adelgaza desde su base a la punta de los dedos, formando una especie de cono. Corresponde a personas intuitivas, imaginativas, amantes de la belleza y la poesía. Suele ser la mano de artistas y personas con tendencia hacia lo artístico, aunque a veces necesitan del apoyo de terceros para desarrollar todo su potencial.

La mano espatulada

La mano se abre como un abanico, con los dedos anchos en sus extremos. Dentro de este grupo podemos encontrar artesanos y artistas en general. Es una mano muy activa, pertenece a personas que tienen gran confianza en sí mismas, instintivas, independientes, materialistas, vanidosas y a veces con un punto de egoísmo.

La mano psíquica

Son manos largas estrechas y delgadas, tanto en la palma como en los dedos. Indica que la persona es idealista, soñadora, poco práctica, de gran imaginación, pero que puede conseguir un gran éxito si sigue el camino adecuado. Con este tipo de mano podemos encontrar escritores, religiosos, inventores e incluso personajes revolucionarios.

La mano filosófica o nudosa

De apariencia larga y delgada, con dedos nudosos en sus coyunturas y engrosamiento de las articulaciones. Revela intelectualidad y tendencia a la filosofía y profundidad del pensamiento. Suelen ser personas poco dadas a la acción, que buscan el conocimiento y con un alto coeficiente intelectual.

La mano elemental

Se corresponde con manos musculosas, anchas y de piel gruesa. La palma es ancha y el pulgar corto. Igualmente, los demás dedos suelen ser cortos. Por lo general pertenece a personas equilibradas, prácticas y tranquilas, aunque también representa a individuos con poca inteligencia y mucha fuerza física. Suele darse bastante en pueblos primitivos, como por ejemplo los indígenas del Amazonas.

La mano mixta

Se caracteriza por su forma ligeramente redondeada y porque los dedos se desplazan hacia el centro de la mano. A su vez, este tipo de mano suele tener dos o tres dedos, cada uno de ellos con la característica de otro tipo de mano. Suele darse con frecuencia en personas pertenecientes al mundo artístico, con alto grado de sensibilidad y emotividad y nada superficiales.

LOS MONTES

Por lo general, cuando alguien nos lee la mano suele limitarse a estudiar la palma de la mano, dando a entender que esta es la parte nuclear de la quiromancia. Sin embargo los bien entendidos en la materia no sólo deben hacer esto, que también, sino fijarse a su vez en los dedos. Su estudio aportará al lector las características del sujeto y le ayudará más y mejor a profundizar en el estudio posterior de toda la mano.

Al examinar la palma de la mano el quiromántico se encontrará con toda una serie de elementos que requieren ser estudiados adecuadamente. Los más importantes son: los montes, los llanos y las líneas.

Los montes representan las zonas de la palma más carnosas o abultadas. Son partes de la palma de la mano que podemos pellizcar fácilmente. Entre los principales montes de la palma de la mano cabe destacar estos:

Monte de Venus

Indica la energía física, sensualidad, sexualidad, sociabilidad, espiritualidad y carnalidad. Según su mayor o menor carnosidad expresará el grado de energía, espiritualidad o materialidad, abundancia o carencia de vida sexual, etc.

Monte de la Luna

Se encuentra en posición opuesta al monte de Venus. Indica la capacidad imaginativa y fantasía del individuo, así como su sensibilidad. Viene a representar el equilibrio que posee la persona entre la realidad y la fantasía. Si es alto revela grandes facultades de imaginación, mientras que si es llano la imaginación es pobre o mal desarrollada.

Monte de Júpiter

Se sitúa debajo del dedo índice. Indica la personalidad consciente ante la vida, nuestra relación con los demás y nuestra sociabilidad. Cuanto más prominente sea, más fuerte será la personalidad y los deseos de dominar a los demás. Si su cima apunta hacia abajo, muestra una persona dedicada a los demás, no tanto por desinterés sino por hacerse necesaria.

Monte de Saturno

Se halla debajo del dedo medio. Refleja el equilibrio entre la introversión y la extroversión. La naturaleza de las relaciones de la persona con el mundo social que le rodea. La mayor o menor prominencia del monte señala la intensidad de estas relaciones. La ausencia de este monte indica un grado alto de frivolidad.

Monte de Apolo o monte del Sol

Esta situado debajo del dedo anular. Representa la emotividad y creatividad del individuo, sobre todo en el mundo artístico. Si está bien desarrollado indica una personalidad profusa y generosa. En él se pueden apreciar el éxito o fracaso en la vida y los problemas y dificultades en el plano profesional.

Monte de Mercurio

Situado bajo el dedo meñique refleja las tendencias científicas, comerciales y prácticas. Según su trazo, abultamiento y dirección, podemos conocer el éxito o el fracaso en las relaciones comerciales, el orden mental, las tendencias e interés hacia las ciencias o el comercio, la habilidad e instrucción hacia el camino elegido, etc.

Montes de Marte

Estos se hallan situados a ambos lados de la mano, entre los montes de Venus y Júpiter (Marte positivo) y los montes de la Luna y Mercurio (Marte negativo). Estos montes nos ofrecen información acerca de los valores físicos y morales de la persona. Nos da la pauta de cómo está nuestro espíritu, temperamento y salud. Marte positivo nos refleja la racionalidad, en tanto que Marte negativo señala la intuición.

LAS LINEAS

Las líneas de mano centran, para la mayoría de personas, la atención principal acerca de la lectura de las manos. Es, tal vez, el elemento más popular de la quiromancia. Sin embargo para el experto en la materia no dejan de ser un apartado más que deberá examinar con detenimiento junto al resto de elementos, que forma el conjunto de la mano, para extraer las pertinentes conclusiones de un estudio total y en profundidad.

Según algunos especialistas en la materia, las líneas de mano vienen separadas en dos grandes grupos: las genéticas o principales y las ambientales o secundarias. Las primeras son las que ya vienen formadas al nacer, mientras que las segundas van apareciendo en el transcurso de la vida. Las líneas principales son tres: línea de la vida, línea de la cabeza y línea del corazón. A continuación vamos a estudiar básicamente cada una de ellas.

Línea de la vida

Tal vez la línea más conocida y la más importante. Nace entre los dedos índice y pulgar, formando una curva que desciende hasta la muñeca. Por lo general su trazo es continuo, sin cortes por otras líneas, poco profunda y de color rosáceo, aunque tal vez sea la línea que ofrece más variaciones. Su significado variará según la forma, longitud, grosor, intensidad, desviación, etc.

El cruce de líneas o puntos transversales alerta sobre problemas de orden físico o momentos de preocupación e inseguridad. En ella se muestra la salud la fuerza vital y la física y se señalan problemas o contrariedades a lo largo de la vida. Dada la complejidad de su lectura, esta se debe realizar y contrastarla en ambas manos, antes de sacar conclusiones.

Línea de la cabeza

También conocida como línea del intelecto. Se halla por encima de la línea de la vida y por debajo de la línea del corazón. Nace junto a la línea de la vida, entre el índice y el pulgar, y cruza horizontalmente la palma de la mano hasta casi el otro extremo. Como su nombre indica, esta línea está relacionada con todo aquello que tiene que ver con la mente, el raciocinio y el intelecto. Refleja las dotes intelectuales de la persona y su longitud indica la capacidad de concentración en los objetivos.

También la rectitud o inclinación de la línea marca el grado de dureza o sensibilidad, según sea su tendencia. A su vez, el espacio de separación existente al inicio con relación a la línea de la vida, refleja la seguridad, personalidad y ego de la persona. Al igual que la línea de la vida, conviene contrastar su lectura en ambas manos.

Línea del corazón

Situada en la parte superior de la palma de la mano, nace justo debajo del monte de Mercurio (dedo meñique). Es la clave para comprender las emociones ya que revela el modo en el que el sujeto se relaciona. Tanto los sentimientos, emotividad, estado de ánimo, relaciones afectivas y sexuales, vienen determinados por esta línea.

La cercanía o separación de la línea respecto a la base de los dedos nos indica el grado de emotividad de la persona. Por otra parte su recorrido, paralelismo o curvatura, nos refleja el tipo de temperamento y carácter afectuoso del individuo. También la longitud de la línea expresa los niveles de espiritualidad, materialismo, fidelidad, posesión, egoísmo, celos, etc. Es una línea íntimamente ligada al corazón, por lo que a su vez puede mostrar problemas relacionados con este órgano vital.

LÍNEAS SECUNDARIAS

Tal como hemos dicho anteriormente las líneas secundarias, no aparecen en el inicio de la vida sino que surgen con el tiempo, a medida que la persona avanza en su paso por la vida. Es más, algunas de estas líneas no aparecerán nunca en las manos de bastantes personas. Línea del destino. Entre las principales líneas secundarias, cabe destacar como una de las principales -para algunos autores se trata de una línea fundamental menor- la línea del destino, también conocida como línea de Saturno y línea de la fortuna. Es una línea problemática, no aparece en todas las personas y si lo hace, su forma es tan diversa que resulta complicada su interpretación. Es la línea que marca y separa el consciente y el inconsciente del individuo. Refleja, a su vez, el buen o mal uso que se hace de los bienes que le ha dado la naturaleza, en suma, la libertad de acción de la persona.

Línea del Sol

También conocida como línea de la intuición. Suele nacer en el centro de la palma y terminar en el monte de Apolo (dedo anular), aunque es posible diversas variantes. Esta línea indica el grado de intuición, creatividad o éxito del individuo.

Línea de Mercurio

Es conocida también como línea hepática. Es una línea que por lo general se dirige hacia el monte de Mercurio (dedo meñique) y muestra el estado de salud -de ahí su referencia al hígado-. Asimismo indica el grado de equilibrio entre el intelecto y el físico.

Línea del matrimonio

Está formada, por lo general, por dos o tres líneas muy cortas y situadas en el filo exterior de la palma, justo en el monte de Mercurio. La más marcada muestra el matrimonio y el resto refieren relaciones pre o extraconyugales.

Línea de los hijos

Situada junto a la línea de matrimonio, pero independiente de ella. También, como en el caso anterior, puede tratarse de varias líneas, que indican el número de hijos. Son difíciles de localizar y complicadas de interpretar.

Línea de la viudedad

Suele ser prolongación de la línea de matrimonio y viene a mostrar el grado de dolor que provoca la muerte o separación del cónyuge.

Las rascetas

O brazaletes. Son las líneas situadas en la base de la palma, justo en la articulación de la mano con el brazo. Por lo general dos o tres, aunque es la primera la que se tiene en cuenta a nivel de lectura. Indica el equilibrio y mantenimiento físico del sujeto.